¿Te gustaría mejorar el aspecto de tu piel, reducir la celulitis y la grasa localizada, y rejuvenecer tu piel? Si la respuesta es sí, quizás te interese conocer la carboxiterapia corporal, un tratamiento estético que utiliza el dióxido de carbono (CO2) para estimular la circulación sanguínea, la producción de colágeno y la eliminación de toxinas. En este artículo te explicamos en qué consiste la carboxiterapia corporal, cómo se realiza, qué beneficios tiene y qué resultados puedes esperar.
La carboxiterapia corporal es una técnica que se basa en la aplicación de microinyecciones de CO2 en las zonas del cuerpo que se quieren tratar. El CO2 es un gas que participa en el proceso de respiración celular. Al inyectarlo en la piel, se produce una vasodilatación que mejora el flujo sanguíneo y el aporte de oxígeno y nutrientes a los tejidos. Además, el CO2 estimula la formación de colágeno y elastina, las fibras que dan firmeza y elasticidad a la piel, y favorece la eliminación de líquidos y desechos metabólicos.
La carboxiterapia corporal se realiza con un equipo médico especializado que controla la cantidad, el flujo y la temperatura del CO2 que se inyecta y realizado por médico estético especializado. El gas se introduce a través de una aguja muy fina. La sensación que se experimenta es similar a un leve pinchazo o una ligera presión. El tratamiento dura entre una hora, hora y media, dependiendo de la extensión de la zona a tratar. Se recomienda realizar entre 4 y 8 sesiones, con una separación de una semana a tres semanas entre cada una. Será el médico estético el que valore dosis, extensión y profundidad de la zona a tratar
La carboxiterapia corporal tiene múltiples beneficios para mejorar el aspecto de la piel y combatir algunos problemas estéticos comunes. Entre ellos, podemos destacar los siguientes:
Mediante las microinyecciones de CO2, reduce significativamente las células adiposas permitiendo eliminar la celulitis
Al aumentar el metabolismo celular, el CO2 favorece el drenaje de las células grasas (adipocitos) y su eliminación por vías naturales. La carboxiterapia corporal es especialmente efectiva para tratar zonas como el abdomen, los flancos, las cartucheras, las rodillas o los brazos.
Al estimular y aumentar la actividad celular de los fibroblastos, células productoras de colágeno y elastina, aumenta la producción de la elastina y colágeno, consiguiendo una piel más tersa y joven.
Al favorecer la regeneración celular, el CO2 ayuda a reparar los tejidos dañados por las estrías o las cicatrices. Así, se consigue atenuar su color y su profundidad, haciéndolas menos visibles.
La carboxiterapia corporal es un tratamiento seguro, eficaz y mínimamente invasivo que ofrece resultados visibles y duraderos. Los efectos pueden variar según las características individuales de cada paciente, como el tipo de piel, el grado de celulitis o grasa localizada, o el estilo de vida. Por eso, es importante realizar una valoración previa para marcar un protocolo personalizado y los resultados reales que se consiguen. La carboxiterapia corporal se puede combinar con otros tratamientos médico-estéticos que mejoren los resultados. Por ello, contamos con nuestro PROGRAMA CMR RUSIÑOL REMODELACIÓN CORPORAL que consiste en la combinación de tratamientos corporales pautados de forma personalizada y según los objetivos que queramos conseguir.
Además, para potenciar los resultados de la carboxiterapia corporal, se recomienda seguir unas pautas saludables como:
Si quieres saber más sobre esta técnica o solicitar una cita, no dudes en contactar con Centro Médico Rusiñol, una clínica de medicina estética en Madrid con más de 30 años de experiencia y un equipo de profesionales altamente cualificados. Te ofreceremos un asesoramiento personalizado y los mejores cuidados para tu piel.
