El rostro es, sin duda, una de las zonas de la piel más afectada por el paso del tiempo. Las arrugas, líneas de expresión y manchas son algunos de los efectos del envejecimiento en la cara. Muchos pacientes acuden a nuestra clínica en busca de un tratamiento para estos signos del envejecimiento. Una de las opciones, tras un diagnóstico previo, es el cóctel de vitaminas facial.
Combate los distintos signos de envejecimiento y del cansancio con este tratamiento completo, donde podrás ver cuáles serán los resultados antes y después.
El cóctel de vitaminas facial o más conocido como mesoterapia fácial, consiste en la aplicación de un cóctel de vitaminas en el área facial mediante microinyecciones. Es una técnica prácticamente indolora, aplicada con la ayuda de anestesia local para evitar cualquier molestia.
En cada sesión se aplica a nivel dérmico un cóctel de vitaminas, minerales y aminoácidos especiales para combatir el envejecimiento de la piel. Todos estos ingredientes (ácido hialurónico, ácido sillico, antioxidantes y oligoelementos) son perfectos para favorecer la formación de colágeno y elastina en la piel del rostro de forma que se potencia la densidad, elasticidad y firmeza de esta.
A medida que envejecemos la piel experimenta cambios y su resistencia va descendiendo poco a poco. Con los años, la dermis y la epidermis se van haciendo cada vez más finas. La piel va perdiendo poco a poco la capa de grasa subyacente, el número de melanocitos desciende y por tanto da lugar a varios a cambios importantes.
La piel ya no está tan protegida como en la juventud y se vuelve más débil y vulnerable a la aparición de manchas, arrugas y líneas de expresión. La mesoterapia facial permite recuperar el aspecto joven y fresco de antes. Con su aplicación se consigue una regeneración celular y aumentar el colágeno para revitalizar la piel del rostro.
Además, contribuye a la eliminación de la flacidez a través de la producción de colágeno y elastina. Consigue un efecto de tensado para que la piel luzca firma, tersa e hidratada. Además, esta técnica también aporta luminosidad y elasticidad.
Para conseguir mejores resultados se puede combinar con la Bioestimulación con factores de crecimiento. El cóctel de vitaminas aporta material de construcción que necesita la célula para reparar la piel y la Bioestimulación es como los “obreros” que fabrican los componentes celulares que se van perdiendo con la edad.
Si quieres nutrir tu piel y devolver esa firmeza y juventud que antes tenía, no lo dudes más y ponte en manos de nuestros expertos de Centro Médico Rusiñol, clínica de medicina estética y cirugía en Madrid.
