¿Estás cansado de esas líneas de expresión en la frente?, ¿Quieres saber cuál es el mejor tratamiento para las arrugas en la frente?
Desde Centro Médico Rusiñol, clínica de medicina estética en Madrid, buscamos que nuestros pacientes se sientan mejor a través del rejuvenecimiento facial. Por eso, hoy te contamos todo sobre las arrugas en la frente, cómo tratarlas y cómo prevenirlas.
Hay varios hábitos que deben evitarse si quieres que no aparezcan esas arrugas tan molestas en la frente de tu rostro.
Se sabe que el sol es cada vez más dañino para nuestra piel, por lo que cuanto menos te expongas a él, mejor. Si vas a hacerlo, por favor ten en cuenta utilizar un protector solar y no hacerlo durante un tiempo prolongado.
De esta manera, la piel se mantiene hidratada. Al deshidratarse, la piel tiende a agrietarse y aparecen las famosas arrugas o líneas de expresión.
Utiliza productos de buena calidad, tanto en el maquillaje como en el producto desmaquillante. Una buena rutina de limpieza facial mañana y noche es un gran aliado contra las arrugas en la frente. En nuestra clínica contamos con un amplio abanico de productos cosméticos para el cuidado facial cuidadosamente analizados y que te aportarán un cuidado específico para cada tipo de piel.
Una alimentación rica en omega 3 te aportará una mayor hidratación de la piel y ayudará a la prevención de las arrugas.
Tanto con expresiones faciales exageradas, cuando te expones al sol o por problemas de visión, es muy frecuente fruncir el ceño. Para la exposición al sol no olvides utiliza gafas de sol, sombrero o gorra para evitar que te afecte a los ojos, y por tanto, frunzas el ceño.
El tratamiento que recomendamos desde nuestra clínica de medicina estética en Madrid para eliminar las arrugas de la frente es el bótox. La toxina botulínica se aplica en la frente relajando el músculo y disminuyendo su contracción. Es el tratamiento ideal para aquellas arrugas o líneas de expresión producidas por el exceso de contracción y que no se pueden eliminar con relleno. Con el envejecimiento, estos músculos se van haciendo más tensos y permanentes, puesto que los músculos se contracturan y pierden longitud al volver a estirarse.
La toxina botulínica A es una toxina producida por el ClostridIum Boltulinum, una bacteria que buscará una acción local en la zona tratada.
Los resultados de la aplicación del bótox en la frente tienen una duración de entre cuatro y seis meses. No solo se alisan las arrugas actuales, sino que también ayuda a prevenir para que no se formen nuevas.
El tratamiento de bótox para arrugas en la frente, forma parte de nuestro Programa CMR Full Face, armonía facial. Un programa donde combinamos diferentes tratamientos para conseguir una armonización facial a través de un protocolo integral que trata todos los signos del envejecimiento de forma integral con un resultado muy natural.
Si estás interesado en aplicarte bótox en la zona de la frente y eliminar esas molestas arrugas, no dudes en pedir una primera consulta gratuita en Centro Médico Rusiñol, donde te asesoraremos y crearemos un protocolo personalizado para ti.
El bótox o toxina botulínica es sin duda uno de los tratamientos más revolucionarios del siglo en medicina estética facial. Sin cirugía y sin efectos secundarios, el bótox se suele aplicar en 3 zonas específicas: entrecejo, frente y patas de gallo.
Desde Centro Médico Rusiñol, clínica de medicina estética en Madrid, te acercamos todo sobre las 3 zonas en las que se aplica bótox, para obtener un rostro más terso y sano con un tratamiento mínimamente invasivo.
No se debe aplicar bótox cuando la arruga es por pérdida de volumen.
Cuando se piensa en el resultado global del rostro, siempre es ideal aplicar la toxina botulínica en el tercio superior.
En caso de querer eliminar arrugas como surco nasogeneano, rictus (líneas de marioneta), etc, en el tercio inferior, el tratamiento de elección es el ácido hialurónico, para recuperar los volúmenes perdidos.
Así tenemos tratamientos en el tercio inferior donde la toxina botulínica es el tratamiento de elección como el caso del botox para el bruxismo o el botox en el mentón para tratar las arrugas provocadas por el fruncimiento en esta zona o los pequeños hoyuelos.
Para que la toxina botulínica dure más tiempo en el rostro hay que seguir algunas recomendaciones como la aplicación de fotoprotector de pantalla total en la zona tratada y, sobre todo durante la primera semana, aplicar cada 3 horas.
Esto es debido a que se ha demostrado que la toxina botulínica, sobre todo, durante los primeros días, cuando se está fijando a las placas motoras del músculo tratado e iniciando su acción, es sensible a los rayos UVA que inactivan el bótox haciendo que haya menos toxina botulínica actuando en este punto.
Las tres zonas en las que se recomienda utilizar el bótox, como hemos dicho anteriormente, son: entrecejo, frente y patas de gallo.
La zona del entrecejo, situada entre las cejas, es una zona donde gesticulamos con mucha frecuencia, de forma que es muy habitual la aparición de líneas de expresión y arrugas en esta área. Aunque también es una zona que se ve afectada por factores genéticos (ojos claros, miopía…) que hace que frunzamos con más frecuencia la zona del entrecejo. De esta forma, el aumento de la contracción del músculo o la gesticulación continua, hace que con la edad y por la pérdida de elasticidad y colágeno, perdamos elasticidad en la zona y por tanto, aparezcan unas líneas de expresión más pronunciadas.
Lo que se busca al infiltrar el bótox en la zona conocida como “patas de gallo” es relajar el musculo periocular que cuando se contractura tira de la ceja hacia abajo haciendo el ojo más pequeño y la ceja caída, dando la expresión de “ojo triste” . De esta manera, se libera la actividad del músculo frontal. Se puede incrementar la altura de las cejas, o dar mayor tensión en el parpado superior. Todo esto con el objetivo de dar un efecto rejuvenecido en el rostro y una mirada más despierta y relajada.
Lo que se busca aquí al inyectar el bótox es que la zona de la frente se vea más rejuvenecida, y eliminar las arrugas de expresión que aparecen por la continua gesticulación en esta zona.
Estas arrugas surgen en pieles más maduras ya que los músculos se contracturan y no son capaces de volver a relajarse de forma completa.
En Centro Médico Rusiñol contamos con el Programa CMR Full Face, armonización facial. Un protocolo completo donde tratamos todos los signos del envejecimiento de forma integral para conseguir un resultado más armónico y natural. De esta forma, gracias a la combinación de diferentes tratamientos, prevenimos y actuamos ante cualquier signo del envejecimiento: pérdida de volumen, calidad de la piel, arrugas, líneas de expresión, flacidez, ojeras, etcétera.
Si estás interesado en aplicar bótox en alguna de estas zonas del rostro o llevar a cabo un tratamiento integral, confía en Centro Médico Rusiñol, donde tras un diagnóstico personalizado te asesoraremos sobre cuál es el protocolo que debemos seguir según tu caso. Reserva cita en el 676 043 524.
Cada día llegan nuevos tratamientos tanto para mejorar nuestra estética como nuestra salud. Y por eso hoy queremos hablar sobre la relación entre la reducción de óvalo facial por el bruxismo tratado con bótox.
Desde Centro Médico Rusiñol, clínica medicina estética en Madrid, te acercamos toda la información necesaria para tratar el bruxismo con bótox y los efectos estéticos.
Como ya hemos hablado con anterioridad, el bruxismo son movimientos inconscientes que realizamos con la boca mientras dormimos. Surge por hacer fuerza extra con los músculos de la mandíbula, y se lo conoce también como “rechinar los dientes”. Apretamos de más, y eso genera el desgaste de los dientes y, por lo tanto, dolores musculares en la zona mandibular e hipertrofia de los músculos maseteros.
Las consecuencias del bruxismo son molestias crónicas en la boca debido a la presión del músculo, aumento de los laterales de las mejillas por hipertrofia (aumento del tamaño) de los músculos, dolores de cabeza, insomnio, estrés, ansiedad y la alineación inadecuada de la mandíbula.
El bruxismo puede generar daños en los dientes, alteración del óvalo facial al aumentar el lateral de las mejillas por aumento muscular. Además, produce dolores de cabeza relacionados con la tensión y dolor en el rostro muy intenso.
Otro efecto adverso son los trastornos auditivos ya que al estar las articulaciones temporo mandibulares delante de los oídos, pueden aparecer sonidos como una especie de chasquidos.
Como solución al bruxismo, la aplicación del bótox cuenta con muy buenos resultados. Es un tratamiento de tipo sintomático, que resuelve la hipertrofia del músculo masetero por excesiva contracción del músculo. El tratamiento es ambulatorio, mínimamente invasivo y necesita pocas sesiones.
Si bien la idea de aplicar bótox maxilar en este caso está enfocado a resolver el bruxismo, también puede contar con beneficios estéticos. Aquí aparece la reducción del ovalo facial. Al reducir la tensión del músculo masetero, se reduce su volumen. Por lo tanto, la reducción del óvalo facial, adelgazando y estilizando el rostro.
Los resultados del Bótox se ven rápidamente, empezando a notarse al tercer día, y llegando a su punto máximo entre los 10 a 15 días.
Con los años, el rostro pierde definición que, por los signos del envejecimiento, va disminuyendo su contorno mandibular. Pero si el objetivo principal es la remodelación del óvalo facial de forma integral, existe un protocolo completo, dentro de nuestro Programa CMR Full Face, que combina bioestimulación con factores de crecimiento, hilos tensores, ácido hialurónico y mesoterapia e Hifu 4D, tratando pómulos, mentón y línea mandibular de forma integral.Si estás interesado en conocer más sobre los beneficios de la aplicación de bótox o cómo conseguir la reducción del óvalo facial sin cirugía, pide cita sin compromiso en el 676 043 524.
El bótox en el mentón antes y después, es un tratamiento médico-estético perfecto para completar la armonización del rostro sin necesidad de tener que pasar por quirófano.
En Centro Médico Rusiñol, clínica de medicina estética en Madrid, te asesoramos de la mano de nuestra Dra. Mª de los Ángeles López Marín para analizar y estudiar tu caso, sigue leyendo para conocer cómo es nuestro tratamiento de bótox en el mentón antes y después.
Tanto una proyección del mentón como la búsqueda de un mentón más fino y armonioso, es una de las mayores preocupaciones de nuestros pacientes. Es por eso por lo que para armonizar esta aparte del rostro, combinamos infiltraciones de ácido hialurónico cuando necesitamos proyección y utilizamos inyecciones de toxina botulínica, más conocida popularmente como bótox cuando tenemos fruncimiento, arrugas y pequeños hoyuelos en el mentón.
La infiltración de bótox combinada con el ácido hialurónico es perfecta para quienes buscan corregir, de forma no invasiva, ni someterse a una cirugía, la armonización de los rasgos faciales.
Al inyectar la toxina botulínica en el tejido muscular de la barbilla, se bloquean los receptores celulares de las placas motoras musculares, produciendo su relajación alisando las líneas de expresión que surgen de la gesticulación y eliminando así todas las arrugas y fruncimiento del mentón.
Este tratamiento se realiza tras llevar a cabo un estudio personalizado del paciente, dónde se analiza su caso y necesidades. Es entonces cuando se establece la cantidad de bótox que se ha de infiltrar, y si es necesario complementar el proceso con otros tratamientos como la combinación o no con ácido hialurónico que incluimos en nuestro Programa Full Face, un programa integral donde tratamos todos los signos del envejecimiento en conjunto. De esta forma conseguimos un equilibrio entre todos los rasgos de la cara
El tratamiento con bótox es seguro y sencillo, pero es importante tener en cuenta que debe ser realizado por especialistas en medicina estética para obtener el resultado buscado y de forma equilibrada con respecto al resto de rasgos faciales. Durante el tratamiento, el paciente puede notar pequeñas molestias por la sensación del pinchazo, pero para ello aplicamos anestesia en crema, antes de aplicar la Toxina botulínica siendo un tratamiento indoloro que dura entre 15 – 30 minutos.
Tras la infiltración, el paciente puede notar algunos efectos secundarios como hinchazón, enrojecimiento en la zona o pequeños moretones que desaparecen a las horas o pocos días.
Los efectos del bótox aparecen a partir del tercer día de su infiltración, teniendo su máximo efecto a los 15 días que es cuando valoramos el efecto final y dichos efectos duran entre 4 y 6 meses, si se aplica ácido hialurónico este puede durar 12 a 18 meses dependiendo de cada paciente. Cabe destacar que se puede continuar el tratamiento para alargar sus efectos en el tiempo repitiendo las infiltraciones pasados los 4 meses.
En nuestra clínica podrás realizar este tratamiento y conseguir ese efecto de rejuvenecimiento del mentón que tanto deseas. Puedes solicitar una cita con nuestra doctora, llamando al número de teléfono 676 043 524, o a través de WhatsApp, para obtener una valoración personalizada que se adapte a los resultados que buscas y a tus propias necesidades.
El bótox maxilar es una técnica empleada en tratamientos de medicina-estética para tratar el bruxismo. El bruxismo es el movimiento involuntario de los músculos de la mandíbula, que suele ocurrir más frecuentemente durante el sueño. En ese momento, se produce lo que conocemos como “rechinar los dientes”, es decir, se aprieta la mandíbula más de lo normal. Una de sus causas está asociada al estrés.
En Centro Médico Rusiñol, clínica de medicina estética en Madrid, te explicamos en este artículo en qué consiste el bótox maxilar para tratar el bruxismo y cuánto dura.
La aplicación del bótox para el bruxismo tiene una función de tratamiento sintomático, es decir trata la hipertrofia del músculo masetero debido a la excesiva contracción del músculo por distintas causas entre ellas el estrés, ansiedad, etc. Es un
tratamiento ambulatorio, poco invasivo y una de las técnicas más efectivas.
Tras la correspondiente evaluación del paciente, el profesional estimará cuántas unidades de bótox serán necesarias.
Con respecto a su duración después de la aplicación, el tiempo estimado oscila entre los 4 a 6 meses según el paciente. Terminado este período, es recomendable repetir el tratamiento según el caso.
La sesión dura aproximadamente 30 minutos. Se utilizan microinyecciones para aplicar la toxina botulínica en el músculo masetero. El efecto que sentirá el paciente es una relajación de los músculos tensos que provocan el bruxismo.
Es importante aclarar que la aplicación del bótox maxilar contra el bruxismo no afecta la capacidad de masticación. Ahí está la pericia del médico estético en valorar la dosis de toxina botulínica a aplicar (bótox) que sea la adecuada para relajar el músculo pero no tanta como para impedir la masticación.
El tratamiento con inyecciones es totalmente indoloro. Es un procedimiento ambulatorio y mínimamente invasivo, por lo que el paciente no requiere ninguna recuperación especial y puede continuar su vida con normalidad.
El bótox está compuesto por una neurotoxina producida por una bacteria con muchas propiedades beneficiosas, si se aplica adecuadamente tanto para tratamientos estéticos como para el cuidado de la salud (como jaquecas, migrañas, distonías etc.).
Uno de los beneficios del bótox maxilar para el bruxismo es que se encarga de relajar la acción muscular del masetero, evitando su hipertrofia y el desgaste de los dientes o rotura de los mismos así como evita dolores de cabeza debido a la tensión muscular en el área de cierre mandibular (masetero y músculo temporal de la cabeza). También tiene un uso más estético, para tratar las arrugas de expresión, debidas a gesticulación.
El bótox maxilar para el bruxismo es una técnica más efectiva. En cuanto a los resultados son casi inmediatos, ya que sus efectos pueden notarse a los 3 días y el resultado total se aprecia a los 10 o 15 días aproximadamente después de su aplicación.
Pueden surgir dudas en cuanto a si la aplicación de bótox tendría efectos secundarios a nivel estético en el rostro. Debemos destacar que el objetivo de las infiltraciones de bótox maxilar para el bruxismo no es alterar las facciones. Aunque tras un tiempo, al reducir la tensión del músculo masetero, puede provocar la reducción de su volumen. Es decir, un leve afinamiento del rostro.
Para cualquier consulta, no dudes en contactar con nosotros en el 676 043 524.
Cada vez más, nuestros pacientes buscan conseguir unas cejas perfectas: son aquellas cejas arqueadas en su justa medida, bien definidas sin necesidad de maquillaje, elevadas y sin la presencia de arrugas a su alrededor, como por ejemplo en la zona del entrecejo. Este es el ideal que muchos quieren alcanzar, pero no siempre es tan sencillo: la edad, el estrés, los hábitos y la alimentación pueden tener también consecuencias sobre las cejas.
En Centro Médico Rusiñol, clínica de medicina estética en Madrid, podemos ayudarte a contar con cejas perfectas. Solo debes dar el paso y comenzar alguno de nuestros tratamientos. ¿Lista para el desafío? Deshazte de todas las dudas con este artículo.
Las principales preocupaciones surgen cuando comenzamos a apreciar una disminución en el grosor de la piel de los párpados y la frente. Además, vemos que con la edad incrementa la espasticidad (la contracción permanente) del músculo periocular el cual es responsable de que nuestro ojo aparezca más pequeño, más cerrado y que la cola de la ceja descienda, produciendo las patas de gallo y las cejas caídas, en especial la cola de las cejas. El músculo periocular es más potente que el músculo frontal que mantiene elevadas a las cejas. Como consecuencia de esto, vemos que nuestras cejas comienzan a descender hacia los ojos, en una caída que también incluye la piel de los párpados. Todas estas consecuencias del envejecimiento dan como resultado una mirada cansada y triste.
De esta forma, nuestra mirada se ve cansada y nuestra edad parece multiplicarse inmediatamente de forma exponencial. ¿Qué hacer frente a esto?
El propósito de un tratamiento estético destinado a lograr cejas perfectas debe ser elevar nuevamente las cejas, reducir el exceso de piel en los párpados para eliminar esa sensación de cansancio y, si fuera necesario, “rediseñar” la forma de las cejas para que las mismas muestren una estética más acorde con nuestra expresión.
Tras un diagnóstico previo donde valoremos las necesidades y objetivos del paciente, existen dos tratamientos principales con los que conseguir unas cejas perfectas que se pueden aplicar por separado o en conjunto, Botox e Hifu 4D. Que también podemos combinar con un tratamiento de relleno como es el ácido hialurónico para tratar las ojeras consiguiendo un resultado en conjunto para el rejuvenecimiento facial.
La Toxina Botulínica o Bótox en las cejas produce un efecto relajante en la contracción del músculo periocular que es lo que produce la formación de arrugas, elevando la cola de las cejas. Lo ideal es aprovechar para tratar también las arrugas del entrecejo y corregir las patas de gallo de forma que conseguiremos un rejuvenecimiento total en toda la zona periocular. Cuando tenemos una ceja media baja o cola de la ceja caída, a través de la infiltración del bótox en la zona externa de la ceja suavizamos la tracción hacia abajo y potenciamos su elevación.
También, cuando nos encontramos con cejas muy arqueadas, infiltrado el bótox en ambos extremos de la ceja hace que se eleven ambos suavizando el exceso de cejas arqueadas con un resultado más equilibrado.
Siempre será tu Médico Estético el que valore tu caso en concreto y decida donde y que tratamiento aplicar.
Se trata de una reafirmación facial no quirúrgico ideal para la reducción de líneas de expresión y arrugas, incluso cuando empiezan a aparecer. Los efectos del Hifu 4D desembocan en la regeneración de la piel en toda esta zona, incrementándose la producción de colágeno. A partir de esto, aumenta la fuerza y la tonicidad de la piel eliminando pequeñas arrugas y dando firmeza a la zona, idóneo para arrugas incipientes.
Por último, recuerda que en Centro Médico Rusiñol podrás realizar estos tratamientos y acceder a una primera consulta gratuita. Pide cita en el 676 043 524. Te estamos esperando.
Sonreír es una de las mejores cosas que podemos hacer. Pero en algunas ocasiones existe alguna problemática que nos insta a ocultar la sonrisa como es la sonrisa gingival. Por ello, hoy vamos a ver qué es la sonrisa gingival así como la solución del botox para corregir la sonrisa gingival.
Una sonrisa gingival es cuando el labio superior se levanta demasiado por encima de los dientes, exponiendo las encías superiores y dando como resultado lo que puede percibirse como una sonrisa «gingival» poco atractiva.
Esto puede deberse a varios factores, pero la razón principal por la que esto sucede, y es tratable con toxina botulínica tipo A, es cuando el músculo que eleva el labio superior está hiperactivo. Además, una sonrisa gingival puede ser más severa si tienes un labio superior delgado, lo que contribuye al problema al exponer aún más la encía superior.
Algunas causas de una sonrisa gingival son:
Para corregir la sonrisa gingival con botox, llevamos a cabo microinyecciones con pequeñas dosis (normalmente de dos a cinco unidades) en el músculo elevador entre el labio superior y la nariz. A diferencia de la cirugía y los tratamientos de ortodoncia, es mínimamente invasivo y no necesita tiempo de recuperación.
Gracias a la aplicación del botox conseguimos una armonización de la sonrisa sin necesidad de cirugía y con resultados inmediatos y una recuperación rápida. Así como disminuimos la hiperfunción del músculo elevador del labio superior y reducimos la cantidad de encía que se muestra al sonreír.
Los efectos del botox para una sonrisa gingival suelen durar de 3 a 6 meses, dependiendo del paciente. La pequeña cantidad de Botox requerida para el procedimiento reduce la longevidad de los resultados de Botox, al igual que el movimiento constante del músculo alrededor de la boca que se usa para hablar, comer y beber.
Para mantener los efectos deseados del procedimiento de botox para corregir la sonrisa gingival, es importante contar con dosis de refuerzo a los 3 meses.
Si la sonrisa gingival te impide mostrar tu sonrisa, no dudes en pedir cita a Centro Médico Rusiñol, Clínica de Medicina Estética en Madrid, donde tras una consulta previa analizaremos tu caso en particular y te pautaremos el mejor tratamiento. ¡Llámanos al 676 043 524!
Entre los primeros síntomas del envejecimiento se encuentra la aparición de las arrugas que aparecen alrededor de los ojos. Por ello, hoy veremos el tratamiento de botox para patas de gallo antes y después.
¿Qué conseguimos con el Botox para patas de gallo?
Al igual que ocurre al aplicar botox en el entrecejo, las patas de gallo se forman como consecuencia de ser una zona donde existe mucho movimiento debido a la gesticulación, originándose arrugas de expresión; pero en caso de pieles maduras, los músculos se contracturan y no tienen capacidad de volver a relajarse. Aunque también hay otros factores que pueden llevar a la aparición temprana de las patas de gallo como es la falta de hidratación o agentes externos como los rayos solares.
A través de inyecciones de botox en esta zona conseguimos relajar el músculo orbicular, el músculo cuyo exceso de contracción causa las patas de gallo. De esta forma, al suavizar la contracción, reducimos el efecto de arrastre del músculo sobre la piel y, por tanto, conseguimos eliminar esas líneas alrededor de los ojos.
Y en caso de pieles más jóvenes, es posible aplicar un tratamiento preventivo, “baby botox”, que consiste en microinyecciones con menos dosis y que evita la aparición de nuevas arrugas y líneas de expresión, teniendo un efecto preventivo sobre el exceso de contracción muscular y la aparición de arrugas
Al igual que en todos nuestros tratamientos, es importante contar con una consulta previa. De esta forma analizamos las necesidades de cada paciente, asesoramos y acotamos la zona a tratar así como la dosis de toxina botulínica que es necesario inyectar para obtener un resultado natural.
Es un tratamiento ambulatorio que no necesita anestesia y tras el cual puedes volver a tus rutinas diarias sin ningún problema.
Por lo general, verás los resultados a los 5 días tras su aplicación, con un efecto completo en 1-2 semanas.
Además, Este tratamiento puedes combinarlo también con relleno de ácido hialurónico y con Skinbooster para conseguir una mirada perfecta.
Depende de las características de cada paciente, pero su duración puede oscilar entre 4 y 6 meses, aunque es recomendable una sesión de refuerzo a los 4 meses.
Al igual que con la mayoría de los procedimientos médico-estéticos, el riesgo no es común si acudes a un médico especializado.
En nuestra Clínica de Medicina Estética en Madrid, contamos con una amplia experiencia tanto en la aplicación de botox en las patas de gallo como en otros tratamientos médico-estéticos faciales que buscan el rejuvenecimiento de forma natural y equilibrada.
Ya hemos hablado anteriormente de en qué consiste el tratamiento del botox en la frente, pero hoy, aparte de hacer un repaso sobre ello, nos centraremos también en el precio del botox en la frente.
La toxina botulínica o botox es uno de los tratamientos más demandados por nuestros pacientes indistintamente del género. Tanto hombres como mujeres a partir de los 30 empiezan a denotar los signos del envejecimiento que incluyen en la aparición de las arrugas que comienzan siendo más superficiales, pero terminan siendo más profundas.
En el caso de la zona superior del rostro, además, se forman estas arrugas como consecuencia de ser un área con mucho movimiento de gesticulación tanto involuntaria como voluntaria. De esta forma, se crean arrugas de expresión que en el caso de pieles jóvenes, los músculos tienen capacidad de relajarse y hacer que la piel de nuevo se alise; pero en caso de pieles más maduras, los músculos se contracturan y no son capaces de volver a relajarse de forma completa. De esta forma, estos pliegues se convierten en permanentes y aparecen las arrugas de expresión tanto en frente como entrecejo y patas de gallo.
A través del botox inyectado en estas zonas, donde el músculo está contraído, lo relajamos acabando así con las arrugas de expresión. Mediante las microinyecciones de toxina botulínica se bloquea o disminuyen los impulsos dirigidos al músculo que como resultado se relaja y la piel vuelve a su estado natural.
Si tienes dudas sobre la aplicación de botox, te dejamos estas 10 preguntas clave para perder el miedo al botox, donde verás que al contrario de lo que se piensa, los resultados son muy naturales, no invasivos y no paralizan en absoluto los músculos.
Lo importante es ponerse en manos de un especialista médico estético que, tras un diagnóstico previo, sepa tanto la cantidad como la zona donde inyectar el botox y así conseguir como resultado una piel relajada, joven y muy natural a la hora de gesticular.
Se trata del tratamiento ideal para las líneas de expresión, sobre todo en la zona de la frente y cuya duración es de 4 a 6 meses, aunque desde nuestra clínica de medicina estética de Madrid, recomendamos una sesión de refuerzo a los 4 meses.
La toxina botulínica conocida popularmente como bótox tiene un sinfín de aplicaciones dentro del área de la salud y la estética. Uno de sus usos no tan conocidos pero más efectivos es el bótox para el bruxismo.
Cuando se trata de contracciones inconscientes de la mandíbula, la aplicación de bótox cumple con una función curativa.
Se le conoce como bruxismo al movimiento involuntario de los músculos de la zona de la mandíbula. Pueden surgir en cualquier momento del día, pero son mucho más comunes durante el sueño. Este problema es conocido comúnmente como rechinar los dientes, pero también se asocia con apretar la mandíbula más de lo normal. Se trata, por tanto, de un problema producido en la articulación temporomandibular, especialmente en el músculo masetero, y cuyas causas son múltiples y una de ellas es el estrés o la tensión nerviosa acumulada y que afecta a un 15% de la población.
En caso de no tratarse, el bruxismo puede terminar en molestias crónicas debido a la presión constante del músculo. Y como consecuencia, se pueden producir fuertes cefaleas, insomnio, estrés y ansiedad, así como la alineación inadecuada de la mandíbula.
Para tratar el bruxismo se aplica la toxina botulínica a través de microinyecciones. No requieren recuperación y son totalmente indoloras. Además, tras su aplicación no se necesita utilizar férulas de descarga, por lo que incrementa la comodidad del paciente.
Con la ayuda de la aplicación del bótox, se produce una relajación de los músculos tensos que causan el bruxismo.
La toxina botulínica es una neurotoxina producida por una bacteria y que cuenta con muchos beneficios tanto para la estética como para la salud. Esta sustancia se encarga de relajar la acción muscular, de ahí su uso para evitar las arrugas o reducir síntomas de trastornos neuromusculares.
Como ya hemos dicho, se utiliza a través de pequeñas inyecciones en los músculos de la mandíbula para relajar su tensión y así tratar el bruxismo. Es un procedimiento totalmente ambulatorio y mínimamente invasivo, dejando que el paciente continúe su vida de forma normal tras la sesión.
El bótox para tratar el bruxismo es de las técnicas más efectivas.
Sus efectos comienzan a notarse a los 3 días y su efecto máximo es a los 10-15 días después de su aplicación, y su duración oscila entre los 6 y 9 meses, dependiendo de cada paciente. Tras este período, se recomienda repetir el tratamiento dependiendo de cada caso.
Si tienes problemas de bruxismo, no dudes en ponerte en contacto con nuestros profesionales en Centro Médico Rusiñol, clínica de medicina estética en Madrid, para ponerle fin a tus problemas de bruxismo.
La arrugas verticales del entrecejo tienen su aparición cronológica entre los 30 o 35 años y pueden adelantarse o intensificarse si tienes los ojos azules o miopía, que son ojos fotofóbicos (molesta la luz del sol y hacen que se arrugue más, también si usas mucho el ordenador o sufres de estrés). Estas arrugas verticales entre las cejas no son muy favorecedoras da aspecto de enfado permanente, pero afortunadamente, existe la solución gracias al Bótox.
Con la edad los músculos, lo del cuerpo y los de la cara se contracturan y esa contracción permanente o ausencia de relajación completa es lo que origina las arrugas del rostro del tercio superior, entrecejo, patas de gallo y frente. Que tienen una aparición cronológica entre los 30 o 35 años y se acentúa con distintos factores, como hemos mencionado antes, de estrés, ojos claros, miopía, factores genéticos, forzar la vista etc.
La forma de saber cuando hay que aplicar el bótox es cuando en reposo se marcan esas arrugas de expresión y no desaparecen.
El tratamiento con Bótox es un procedimiento no quirúrgico y mínimamente invasivo que funciona al relajar los músculos tensos que causan las líneas de expresión. El tratamiento también ayuda a prevenir una mayor profundización de estas líneas de expresión
El bótox va directamente a la fuente del problema, los músculos. Las inyecciones de bótox modulan las señales del nervio al músculo, reduciendo la actividad muscular pudiendo relajar el músculo o paralizarlo, según el efecto que queramos conseguir y evitando temporalmente que formen arrugas entre las cejas o patas de gallo o frente.
Existen la creencia errónea de que el botox paraliza los músculos y por tanto se pierde naturalidad, pero esto es falso. Podemos obtener el resultado que queramos: paralizar el músculo con un efecto más intenso y más duradero o relajar el músculo con un efecto más natural pero menos duradero.
Hay muchas razones por las que Bótox demuestra ser un enfoque popular y mejor que otros tratamientos tópicos o cualquier cirugía estética.
A diferencia de las cirugías estéticas, los resultados del Bótox son semipermanentes. La apariencia relajada de tu piel se puede mantener todo el tiempo que desees, siempre y cuando cuentes con sesiones de mantenimiento.
El bótox funciona para las arrugas dinámicas causadas por las expresiones faciales cotidianas, donde la mayoría de los tratamientos pueden fallar o es probable que brinden resultados insatisfactorios.
Los resultados de Bótox comienzan a mostrarse 3 días después del procedimiento con un efecto máximo a los 15 días, momento en el que se revisa el tratamiento y se hace intensificación del tratamiento si fuese necesario. Con el cuidado posterior adecuado, puedes disfrutar de una piel sin arrugas durante unos 4 meses, momento en el que comienzan a atenuarse los resultados.
En el caso del bótox, el precio es por zonas, 300 €/sesión, según si se tratan las arrugas de la frente, de las patas de gallo, del surco nasogeniano, etc. Pero en caso de querer llevar a cabo un tratamiento global que es mucho más natural y que permita tratar todas las arrugas de forma armónica, el precio es de 450 € por sesión de frente, entrecejo y patas de gallo.
Pide cita sin compromiso en Centro Médico Rusiñol, clínica de medicina estética en Madrid.
